lunes, 21 de octubre de 2013

Navegar como un regatista oceánico por un día

Una gozada, irrepetible, algo único. Así describieron una docena de afortunados alumnos la experiencia de navegar a bordo del Telefónica Negro con tres navegantes oceánicos en aguas gallegas.
 
El barco, ahora con la imagen de Movistar, participó en la edición 2008-09 y terminó en sexta posición. El sábado ofreció a los participantes la posibilidad de experimentar cómo se vive a bordo durante la vuelta al mundo a vela y qué se siente a 25 nudos de velocidad.


Master Class a bordo del Telefónica Negro © María Muiña/SailingShots

“Estas Master Class (...) son una gozada. Navegar un día como hoy, con 25 nudos de viento, en el ‘Telefónica negro’ es un lujo. Ir a estas velocidades a vela, no puedes hacerlo en un barco cualquiera. Es algo único y una experiencia irrepetible”, comentaba Manuel, uno de los participantes que venía hoy a Sanxenxo en referencia al programa de clases magistrales de Movistar en Galicia.

Diego Fructuoso, Pablo Arrarte y Pablo Iglesias, participantes en las ediciones de Volvo Ocean Race 2008-2009 y 2011-2012, fueron los encargados de enseñar al ilusionado grupo de gallegos, que también probaron y prepararon la comida liofilizada que toman los regatistas.

“La gente se ha divertido mucho y todos han podido sentir la experiencia de navegar en la vuelta al mundo”, comentó Fructuoso, que compitió en 2011-12 junto con Arrarte.

“Las velas las han subido ellos, todos han llevado el barco. La idea era que hicieran un poco de todo: ‘conducir’ algún rato y también a darle al coffee [manivela] para subir las velas, por ejemplo. En estos barcos hay que trabajar a tope y está claro que lo han podido ver”,  explicó Fructuoso.

“Con Diego hice la vuelta al mundo y tenemos mil historias para contar y reír”, apuntó Arrarte.

La próxima cita con el Telefónica Negro será el sábado día 26 en Vigo, donde habrá otra clase magistral con varios vueltamundistas españoles que compartirán con los participantes sus experiencias vividas en la Volvo Ocean Race.

Saludos y buenos vientos


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