Perder peso para los JJ.OO y ganarlo para la VOR, esta es la dura realidad..... llevas al cuerpo en un ascensor, ahora ejercicio aeróbico para bajar peso, ahora gimnansio y batidos de proteinas para ganarlo....... ¿Quién dijo que esta vida era fácil? Xabi Fernández nos cuenta como es en la realidad.Xabi Fernández, trimmer del “Telefónica azul” ha vivido muchas cosas en los últimos años. Una dura preparación para los JJ.OO. de Pekín, una medalla olímpica más y una Vuelta al Mundo más. Desde Boston (EE.UU.) nos habla de la adaptación física de los JJ.OO a la Volvo, su evolución y un deseo para la llegada en Rusia: estar lo más arriba posible en el podio.
- Tras una preparación tan dura para los JJ.OO. de Pekín, que requerían estar lo más delgados posible, llega la Volvo…
Para nosotros los Juegos Olímpicos de Pekín fueron muy duros por muchos aspectos. El primero de ellos fue el peso pero nuestro mayor problema era que no íbamos bien con poco viento y teníamos que mejorar muchísimo. Después vino la adaptación a la Vuelta al Mundo. Una semana después de terminar en China ya estábamos en Alicante para salir justo un mes más tarde; y ahí no era una cuestión de peso, sino de fuerza. Al estar tan delgado y haber enfocado toda la preparación olímpica hacia un trabajo aeróbico para perder peso, nos faltaba toda la base de gimnasio y fuerza necesaria para navegar en el VO 70, un barco en el que tienes que mover muchas velas y muchos pesos durante etapas largas de 20 días. Empezamos poco a poco sabiendo que nuestro mejor momento no estaría en la salida, sino más adelante.
- ¿Cómo es el proceso de adaptación de una competición como los JJ.OO de Pekín a la Volvo Ocean Race?
Hay que tener en cuenta que no habíamos hecho gimnasio durante casi dos años porque nos habíamos dedicado a correr y a la bicicleta. Y es duro empezar de nuevo. Te das cuenta que mueves unos pesos ridículos y lo cierto es que incluso mueves menos pesos que el resto de tus compañeros. Hay que ir poco a poco, el mero hecho de navegar en el barco durante las etapas largas te va poniendo fuerte y ahora estamos prácticamente como los demás.
- ¿Y cómo se adapta el cuerpo a estos cambios tan bruscos?
El cambio más duro es el de no comer y tener que adelgazar; sin duda. Al final, ganar o perder es algo raro porque tienes el cuerpo acostumbrado a comer poco y de repente empiezas a comer de más y tomas batidos de proteínas muy calóricos. Tiene gracia, pero no te sienta bien. La verdad es que no sienta bien ni comer poco ni comer mucho, pero en nuestro caso es lo que tienes que hacer y tampoco le das muchas vueltas. El cuerpo al final se acostumbra a todo… Ya pasará factura dentro de unos años (risas)
- Después de prácticamente 30.000 millas encima, echando la vista atrás, ¿cómo ha evolucionado físicamente?
Estoy más fuerte que en la salida, eso seguro. Ha sido mucho trabajo de gimnasio, así que entre eso y una alimentación adecuada he conseguido estar mucho más fuerte… Y pesado. Tengo muchísima más grasa que en la salida ¡y que en China! Recuerdo que para los Juegos Olímpicos estaba en los 77 kg, en la salida de Alicante rondaba los 85 y ahora estoy en 90. Hay un gran cambio y en breve empezaremos a caminar hacia el otro lado otra vez.
- ¿Qué es lo más duro de una etapa físicamente hablando?
Hay muchos días que no son duros y otros que realmente lo son, como cuando estás cerca del Ecuador o de los Doldrums, donde tienes que hacer cambios de velas cada menos de dos horas, tienes que mover pesos, darle a los grinders para izar velas, hay que arriar las otras… Lo que la gente no se para a pensar es que las etapas cortas son muchísimo más duras que las largas, al menos a nivel físico. Las etapas cortas dependen de metros y al final es cuestión minutos (aunque hayamos visto varias etapas que se decidieron al final por cuestión de minutos). Durante las etapas cortas sabes que cada cambio de vela que hagas mejor que otro influirá en la posibilidad de ganar o no ganar. Cuando tienes 40 días por delante y hay un cambio de viento, puedes aguantar con la vela que tienes porque puede ser que vuelva a cambiar y tampoco te puedes volver loco durante 40 días. De hecho, las etapas que quedan de aquí al final van a ser muchísimo más duras, regatas en las que nadie duerme ni hay guardias…
- Comparado con otros deportes en los que la forma física es determinante y no intervienen factores externos como la tecnología de forma tan directa, ¿en la vela hasta qué punto el factor físico es crucial?
La parte física en la vela en general, desde unos Juegos Olímpicos pasando por la Volvo y la Copa América, no te va a hacer ganar una regata. No por estar más fuerte vas a ganar, pero sí te puede hacer perder. En regatas tan grandes como ésta hay otros factores como el barco y su diseño, las velas… y el físico es uno más. No voy a mentir, por supuesto que es importante, pero no podemos decir que es “el factor”. Hay que llevar una muy buena preparación ya que cuanto mejor esté la tripulación antes hará los cambios de vela y antes hará las viradas… Va a marcar una pequeña diferencia, pero si el barco no va, no va.
- Segundos en la general a falta de cuatro etapas, ¿cuál es el objetivo del equipo Telefónica en estas últimas millas?
Nuestro objetivo sigue siendo el mismo: sacar los mayores puntos posibles para estar lo más cerca del “Ericsson 4”. Hay que tener en cuenta que por delante quedan mucho días y todavía puede pasar algo. Lo que no nos podemos permitir es que cuando pase no estemos al acecho.
- Su primera Vuelta al Mundo fue en la edición anterior, ¿se afronta de manera distinta la segunda?
Son diferentes. Es como los Juegos Olímpicos, muchas veces me preguntan si Atenas era mejor o peor que China, y lo que sí puedo afirmar es que la primera vez siempre hace más ilusión. En esta Vuelta al Mundo los objetivos han cambiado con respecto a la anterior e incluso ahora disfrutas más porque tienes muchos más conocimientos y ya nada te “asusta”, por decirlo de alguna manera. No tienes las dudas de si la navegación oceánica te gustará o no, qué te dará miedo y qué no. Esta Vuelta al Mundo la estoy disfrutando más entre otras cosas porque estamos estamos teniendo menos problemas. Lo importante aquí es si te gusta o no te gusta. Y a mí, me gusta.
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Saludos y buenos vientos
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