Ellen, Samantha, Dee, Anne, Isabelle, Catherine, Karen... las mujeres que han tomado parte en la Vendée Globe siempre han emocionado al público y ha sido el foco de nuestra admiración. Para el 2016 la Vendée Globe, nos falta ese toque femenino. Podemos apostar sin embargo a que este hueco pronto estará lleno, recordando lo que sucedió en el pasado...
Samantha Davies, izda. y Dee Caffari, dcha © Jenny Launay / Mer & Media |
Cuando Isabelle Autissier y Catherine Chabaud se situaron en la línea de salida del Everest de los mares en 1996, abrieron la Vendée Globe a la mujer. La primera se vio obligada a parar en Ciudad del Cabo para reparar su timón, después de estar en cabeza con los principales candidatos. Isabelle dejó su huella en la historia de la tercera Vendée Globe al estar varios días buscando sin éxito a su amigo, Gerry Roufs, que se había perdido en el Océano Austral. Fuera de regata, navegó su PRB de nuevo a Les Sables d'Olonne, mientras Catalina Chabaud a bordo del Whirlpool, completaba la regata en el sexto lugar de los quince participantes que habían tomado la salida. La Vendée Globe ya no era de exclusivo dominio de los hombres.
Cuando Ellen MacArthur, la joven británica de 24 años zarpó en el 2000 a bordo del Kingfisher, un barco especialmente construido para ella, el público en general se preguntó cómo se las arreglaría: tan joven, tan frágil... en el timón de un barco tan grande. Pero, ¿qué más se puede decir?, Terminó en segundo lugar detrás de Michel Desjoyeaux, el cual era bastante receloso de la acogida que la iba a dar la multitud congregada en Les Sables d'Olonne a la joven inglesa. En esa edición, Catherine Chabaud perdido su mástil y tuvo que regresar a Vendée fuera de regata. Pero en esa cuarta regata, con 24 competidores, el podio mostró que las mujeres sin duda tenían su lugar.
A bordo del Roxy en el 2004, Anne Liardet demostró al público en general que se puede ser navegante y madre de tres hijos. Anne llegó undécima de veinte participantes, por delante de otra navegante francesa, Karen Leibovici, que acabó decimotercera.
En el 2008, fue el tiempo de que las británicas, Samantha Davies y Dee Caffari, dominaran los medios de comunicación y la web con imágenes que expresan su gran placer mientras navegaban por todo el mundo con estilo. La llegada de nuevo en Les Sables siempre cumple con las expectativas, incluso cuando los regatistas no siempre logran completar la regata, como fue el caso de Samantha, cuyo barco, el Savéol, fue desarbolado a la altura de Portugal en el 2012. Hasta el momento, las damas siempre han logrado llevar sus barcos a casa con el apoyo del público en general, que sigue siendo igual de entusiasta.
Hoy en día, Samantha Davies, Dee Caffari, Isabelle Joschke y Jeanne Grégoire, por citar sólo algunos nombres están soñando con la creación de un nuevo proyecto Vendée Globe. Si no hay mujeres en la línea de salida del 2016, sería retroceder veinte años en la Vendée Globe y eso no puede suceder.
Saludos y buenos vientos.
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