A falta de confirmar la clasificación de todos los participantes, el Estrella Damm podría subir al podio en Brest, pese a las calmas y la avería en el palo.
La tercera y última etapa de la Istanbul Europa Race ha acabado para el Estrella Damm
Tal como se podía prever desde que el pasado día 20 el barco español cayó en un pozo de calmas frente a Portugal que duró hasta el día siguiente y que fue la causa de que el barco de Guillermo Altadill y Pachi Rivero viera como el grupo de cabeza se les alejaba irremediablemente a la altura del golfo de Vizcaya. La causa de esta situación radicó en la avería en el palo (desperfecto en el carril de la mayor a la altura del primer rizo) que aconteció al Estrella Damm en la boca del estrecho de Gibraltar y que le hizo navegar algunas horas por debajo de sus posibilidades, en un momento crucial en el que los barcos que le precedían lograron escaparse de las calmas que iban a llegar.
Las palabras de Pachi Rivero hace tres días describen con claridad la situación que vive cualquier regatista en una circunstancia similar: “Quedarse sin viento es la situación más desesperante posible para un regatista. Nosotros encalmados, pero que muy encalmados, y los otros andando como motos...”.
Una decisión lógica: no virar Wolf Rock
La decisión de Guillermo y Pachi ha sido totalmente lógica, pues al pasar por la boya de la Vandrée, frente a la rada de Brest, aún les quedaban más de 220 millas para completar el recorrido, ya que debían navegar hasta Wolf Rock, al otro lado del canal de la Mancha, y regresar al puerto bretón. Guillermo lo ha resumido con claridad: “Hemos estado durante las últimas 48 horas estudiando todas las previsiones meteorológicas para intentar seguir hasta Wolf Rock y volver a Brest dentro de las 48 horas de límite después del primero y recoger así el punto que nos aseguraba el tercero.... Ayer tuvimos un poco de suerte porque la diferencia de tiempo del Groupe Bel con el Veolia Environnement prácticamente nos asegura el tercer puesto”.
El barco español termina igualado a 10 puntos con el Veolia Environnement. Según el reglamento, al Estrella Damm se le aplicaría el tiempo del último barco en terminar la etapa más seis horas. Aunque el DCNS sigue en regata, es muy improbable que pueda terminar a tiempo para puntuar. Por eso, a la espera de confirmación oficial, el Estrella Damm recibiría el tiempo del Groupe Bel, cuarto en la etapa, más seis horas, lo que gracias a la excelente actuación en la primera y segunda etapas, le mantendría más de dos horas por delante del Veolia Environnement como tercero en la clasificación general.
Balance satisfactorio para Guillermo Altadill y Pachi Rivero
Pese a los contratiempos sufridos, Guillermo Altadill y Pachi Rivero acaban satisfactoriamente su primera regata oficial con su nuevo barco. Han comprobado que su puesta punto va por muy buen camino, han conocido el barco a fondo, obtenido gran cantidad de datos y se han medido con los mejores barcos y patrones de la clase IMOCA Open 60. El siguiente reto es la Transat Jacques Vabre, el próximo siete de noviembre.
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Saludos y buenos vientos
El viernes 14 de junio de 1968 salió de Falmouth el Suhaili, un pequeño queche, con una figura solitaria al timón: Robin Knox-Johnston, de veintinueve años. Diez meses y medio más tarde, un Suhaili oxidado, con la pintura desconchada y las velas rasgadas y marrones, volvió triunfalmente a Falmouth. Robin Knox-Johnston se había convertido en el primer hombre que había circunnavegado el mundo en solitario y sin escalas.
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