miércoles, 3 de marzo de 2010

Atlantic Rowing Race.-







Charlie Pitcher cruza el Atlántico a remo en solitario en 52 días.

El británico se proclama vencedor de la Atlantic Rowing Race tras cubrir la distancia entre La Gomera y Antigua en menos de dos meses. Es la primera vez que un solo remero vence a tripulaciones mayores en una regata transoceánica.

Charlie Pitcher, a bordo de su bote JJ, se ha proclamado vencedor de la Atlantic Rowing Race 2009. El británico ha hecho historia por ser el primer remero en solitario en conseguir la victoria en una regata transoceánica multiclase, en la que buena parte de sus adversarios son tripulaciones de dos o cuatro remeros.


Pitcher, de 47 años, ha remado un total de 2.548 millas náuticas desde la isla canaria de La Gomera hasta la caribeña de Antigua. Su tiempo total ha sido de 52 días 6 horas y 47 minutos. La salida de la regata tuvo lugar el pasado 4 de enero, con casi un mes de retraso a causa de las malas condiciones meteorológicas. Pitcher se colocó en cabeza ya el primer día, aunque pronto fue desbancado a causa del mal tiempo. Los botes que participan en este tipo de regatas disponen de un sistema de anclaje que les permite no perder distancia respecto a la llegada aunque se dé una meteo desfavorable. Y Charlie Pitcher tuvo que hacer uso de este mecanismo en los primeros días. Sin embargo, el británico se rehizo y una semana después volvía a coger la delantera, para no dejarla hasta la meta. El ritmo de progresión de Pitcher fue muy bueno durante las primeras semanas. Incluso parecía poner en jaque el récord actual de la travesía del Atlántico en solitario, que se encuentra en 42 días. Pero otra racha de mal tiempo a media carrera alejó dicha posibilidad.

Las últimas millas fueron muy emotivas para el remero británico: “Cuando supe claramente que iba a llegar a meta ese mismo día, dejé mi mente en blanco. Todo lo que tenía en la cabeza era ‘acaba esto antes de que ese viento cambie otra vez’. Sin embargo, cuando estaba a unas 10 o 15 millas de la llegada y sabía que nada podía detenerme, las emociones me asaltaron y, mientras remaba, me iban cayendo lágrimas de alegría, sin creerme que iba a conseguir lo que me había planteado dos años atrás”, cuenta. A su llegada a English Harbour (Antingua), Pitcher tuvo un gran recibimiento, con toda su familia dándole la bienvenida. Charlie Pitcher es un polivalente aventurero que, entre otros retos, se ha enfrentado a la Marathon des Sables, una carrera de ultrafondo a través de las arenas del desierto.

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Saludos y buenos vientos

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