El culebrón Copa America mantiene alto el listón.
El régimen de vientos de Valencia durante febrero no es el más adecuado para una regata de vela de esta nivel. La juez recurre a expertos para decidir si Valencia es «segura». La nueva audiencia que resolverá el futuro de la Copa América se celebra el miércoles con la inclusión de tres peritos.
El culebrón de la siguiente Copa del América no tiene fin.Cada acción nos depara una nueva rocambolesca situaciónn, esto desde luego no es bueno ni para la Copa América ni para la vela en general.
La juez Kornreich el viernes tarde en Nueva York puso otro punto de fricción entre Alinghi y BMW Oracle. No es una experta en vela y por lo tanto a cada resolución que la togada plantea, salen infinitas preguntas y dudas con criterio. Y el viernes decidió sacarse de la manga una nueva modalidad de vista.
Una vez cerrado su tribunal, envió por fax a los dos sindicatos su decisión, donde les emplaza al miércoles a las diez de la mañana para una nueva vista.
Kornreich ha decidido que tanto Alinghi como Oracle nominen a una persona de su cuerda y que tenga experiencia en reglas de Copa América con ciertas condiciones, debe haber sido juez en una edición, pero la vuelta de tuerca, entre estos dos hombres se deben poner de acuerdo en determinar a una tercera persona.
Esta es literalmente la coña. Alinghi y Oracle no se han puesto de acuerdo ni con el color del carbon, cuanto más para nombrar un mediador trascendental -su voto será decisivo.
El miércoles se producirá una nueva vista a la que están invitados los abogados y se tratará sobre cinco aspectos a los que la juez ha sido incapaz de dar una solución.
Medición: Cómo se mide un barco de Copa América y en este caso si Alinghi está licitado para excluir los elementos movibles de la medición.
Seguridad: Los tres miembros deben decidir si creen que regatear en Valencia en el mes de febrero es seguro.
Cambio de reglas: Se tiene que decidir si Alinghi puede cambiar las reglas después de que se han notificado. Hay que decidir cuando es normal que el defensor presente las reglas de la regata.
Jurado: Hay que poner una fecha para decidir cuándo el defensor debe formalizar el grupo de jueces para la competición.
Acuerdo ISAF: Deben decidir si el acuerdo firmado por Alinghi y la Federación Internacional puede permitir que el panel de jueces actúe de forma independiente.
Alinghi se comprometió a que el día 6 de noviembre publicaría el anuncio de regatas, donde aparecerá formato, fecha y clase de embarcación, así como la normativa legal referente a la Copa del América. La jueza Kornreich propone que, si las dos partes no están de acuerdo en que Valencia sea la sede elegida, se aplace la regata hasta una nueva fecha que debe decidir Oracle.
Para España es el segundo punto si hacer la Copa América en febrero en Valencia «es seguro» el que levanta más espectación. Alinghi estudia la posibilidad de Madagascar, Argentina, Sudáfrica y Namibia, entre otras, y es el equipo suizo el que ha planteado a la magistrada que Valencia, en febrero, no garantiza la realización de la competición. El régimen de vientos en Valencia en febrero, no es el adecuado para este tipo de barcos. Los equipos han construido sus catamaranes de acuerdo a las características del viento de Ras Al Jaima, totalmente diferentes de las de Valencia. Curiosamente, los años en que los equipos de Copa América estaban entrenando en Valencia daban a sus tripulaciones vacaciones en esas fechas.En ese mes o no hay viento o sopla por encima de las expectativas del defensor.
Los suizos prefieren un sitio donde el viento sea estable en menos de ocho nudos y donde haya poca mar. Es ciertamente complicado que en febrero en Valencia se den estas condiciones. Lo normal es que si hay poco mar no haya nada de viento y que si hay viento haya demasiado mar como para navegar con seguridad.
Alinghi ha introducido la versión de la seguridad ya que 'teme' que con vientos fuertes la integridad de los regatistas pueda correr peligro.
¿Cual será el siguiente paso?.....................
Saludos y buenos vientos
El viernes 14 de junio de 1968 salió de Falmouth el Suhaili, un pequeño queche, con una figura solitaria al timón: Robin Knox-Johnston, de veintinueve años. Diez meses y medio más tarde, un Suhaili oxidado, con la pintura desconchada y las velas rasgadas y marrones, volvió triunfalmente a Falmouth. Robin Knox-Johnston se había convertido en el primer hombre que había circunnavegado el mundo en solitario y sin escalas.
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